problema legal

Como resolver un problema legal (Formas de resolverlo)

Todos podemos encontrarnos en algún momento de nuestra vida con problemas legales a los que hay que hacer frente. Sin embargo, mucha gente no conoce todas las formas que existen para poder resolverlos.

Mediación

Este método de resolución de conflictos legales aparece un tercero llamado mediador, que no resuelve el problema entre dos o más partes, sino que ayuda a todas ellas a que encuentren una solución aceptada por todos ellos.

Esta tercera persona es imparcial y se encarga de rebajar la tensión existe en cualquier conflicto, además de ayudar a la hora de generar posibles soluciones. En todo caso, la solución final será tomada por las propias partes.

Conciliación

La conciliación funciona de una manera similar a la mediación, con la salvedad de que en este método, el tercero imparcial que aparece en escena, en lugar de ayudar para que las partes implicadas tomen decisiones, se encarga de proponer soluciones. Estas pueden ser o no aceptadas por las partes.

Negociación

La negociación dentro de la búsqueda de la solución a un problema legal tiene la finalidad de resolver conflictos y poner solución a una disputa. En este caso las partes buscan solventar un conflicto por ellas mismas. El objetivo del mismo es siempre alcanzar un acuerdo.

Juicio (litigio)

En el caso de un litigio, un juez, que es nombrado por la autoridad judicial, se encarga de resolver el el pleito, teniendo en cuenta los hechos demostrado y la aplicación del Derecho al caso en particular. Es la manera más habitual de resolver los conflictos en España.

Arbitraje

El arbitraje es un método similar al juicio en el aspecto de que existe un tercero, que en este caso recibe el nombre de árbitro y que se encarga de resolver el conflicto atendiendo a a criterios de Derecho. Este árbitro se encuentra designado por las partes que forman parte del conflicto y a su costa. La finalidad es conseguir un laudo, que es similar a la sentencia, favorable.

innovaciones legal 2020

Innovaciones en el sector legal 2020

El gran reto para los abogados en 2020, un año marcado en gran parte por la crisis sanitaria por coronavirus que ha afectado a todos los sectores, es el desarrollo de soluciones tecnológicas, entre las cuales se encuentra la intervención de la Inteligencia Artificial.

Las innovaciones en el sector legal puede venir dada por la adopción de nuevas estrategias empresariales, pero también por la tecnología, tal y como promueve el Legaltech. Este término hace referencia a la adopción de tecnologías y programas innovadores en el sector jurídico. Estos pueden estar enfocados a la comercialización de los servicios, para la automatización de procesos legales o para el ejercicio profesional.

Tendencias 2020 en el sector legal

Las tendencias innovadoras en el sector legal 2020 y los retos del mismo son, entre otras, las siguientes:

  • Metabuscadores enfocados al sector jurídico: Existen buscadores digitales que se encargan de recoger información acerca de los diferentes profesionales jurídicos. De esta manera, los clientes pueden encontrar y elegir al abogado, procurador, perito o notario que mejor se adapte a sus necesidades.
  • Aplicación del Big Data: Se basa en el uso del Big Data para obtener información acerca de tendencias y patrones en la conducta de los diferentes órganos judiciales, administrativos y legislativos. Así se podrá hacer una predicción de decisiones futuras.
  • Smart Contracts y automatización documental: Existe la posibilidad de crear documentos estándar a partir de unos datos básicos obtenidos mediante un formulario digital, colocando cada respuesta en el lugar correspondiente dentro de escritos básicos.
  • Asesoramiento legal automatizado: Se han creado diferentes sistemas de mayor complejidad que tienen la capacidad de poder desarrollar funciones jurídicas de una manera totalmente digital. De esta manera se puede ofrecer asesoramiento legal, reclamaciones sencillas o información jurídica de forma más rápida.
  • Herramientas de revisión documental: Existe software que permite a los profesionales analizar grandes cantidades de datos y documentos de una manera muy rápida.
lexbox

¿Qué es Lex-Box? Funcionamiento y utilidad

Lex-Box es un servicio pensado para ofrecer una mayor comodidad y seguridad a la hora de obtener documentos legales. A través de esta plataforma es posible conseguir contratos y documentos legales en cuestión de apenas unos minutos. De hecho, en menos de 10 minutos podrás disponer del documento que necesitas para ser firmado.

Este servicio, que se encuentra diseñado para abogados, emprendedores y Pequeñas y Medianas Empresas cuenta con más de 150.000 redacciones diferentes de contratos, de manera que puedas disfrutar de documentos a medida para una gran cantidad y variedad de aplicaciones.

Una de sus principales características es que estos documentos tienen unos precios competitivos, de forma que se puedan conseguir por hasta 33 veces menos que los que ofrecen los abogados. Es una plataforma fácil y sencilla de utilizar pero que ofrece una seguridad.

Personalización de documentos

Lex-Box es una opción muy a tener en cuenta, sobre todo teniendo en cuenta que ofrece una gran personalización en los documentos. De esta manera podrás dejar debidamente atado todo lo que ataña a tu empresa. En la actualidad cuenta con 480 opciones de acuerdo de confidencialidad; 97.720 opciones de contrato de trabajo; y 50.000 posibilidades para la contratación de prestación de servicios.

La finalidad de este servicio es el de automatizar los documentos legales de una alta calidad, enfocándose en las necesidades particulares que pueden tener Pequeñas y Medianas Empresas, pero también startups y abogados, haciendo que se pueda reducir el tiempo y el dinero empleado en este tipo de documentos, sobre todo en la comparación con la forma tradicional de los abogados corporativos.

Teniendo todo lo anterior en cuenta es importante tener esta plataforma muy en cuenta puesto que permite agilizar de forma considerable los trámites y las molestias, un ahorro en todos los sentidos que puede ayudar en gran medida a los sectores indicados.

el delito de odio

¿Qué es el Delito de Odio y qué conductas castiga?

El delito de odio o la acción de fomentar la violencia contra otras personas o grupos por razones ideológicas, étnicas, racistas, religiosas… busca la protección del respeto a las personas que son diferentes. De esta manera, se trata de buscar la igualdad y la dignidad de todos los ciudadanos.

Conductas castigadas por el delito de odio

El delito de odio castiga diferentes conductas:

Aquellas personas que se encarguen de promover, fomentar e incitar de manera directa e indirecta al odio, hostilidad, discriminación o violencia contra otras personas. Para ello se debe atacar por: motivos racistas; antisemitas; ideología; creencias; religión; etnia, raza; sexo; orientación o identidad sexual; discapacidad; etcétera.

También las de aquellas personas que se encarguen de la producción o posesión de material que promueva odio, hostilidad, discriminación o violencia por los mismos motivos indicados; y lo faciliten a terceras personas.

Por otro lado, también se castiga la conducta de quienes de forma pública nieguen, trivialicen de forma grabe o enaltezcan delitos de lesa humanidad, genocidio o contra bienes protegidos o personas. Siempre que todo ello haya tenido lugar por los motivos anteriormente mencionados y otros similares.

El delito de odio, recogido en el artículo 510 del Código Penal, castiga las conductas anteriores con una pena de prisión de 1 a 4 años, así como una pena de multa de 6 a 12 meses. Si se realizan a través de un medio de comunicación social, se imponen en su mitad superior.

De esta manera, se sanciona a todos aquellos que promuevan algún tipo de discriminación, odio y violencia contra asociaciones o grupos por diferentes motivos. El elemento nuclear para este hecho delictivo consiste en expresiones, califacativos, expresión de epítetos y que contiene un mensaje de odio; y este se transmite de forma genérica.

Este tipo de actitudes y expresiones, por su gravedad, hieren los sentimientos comunes a una ciudadanía.

derecho familiar impuesto sociedades

El derecho de un sobrino político a la reducción por parentesco en el Impuesto de Sucesiones

La Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Supremo ha decidido equiparar a los parientes de sangre a la hora de lograr la reducción por parentesco en el Impuesto de Sucesiones.

Esta sala decidió reconocer el derecho de un sobrino político en su sentencia. Consideró que se tienen que incluir en el Grupo III de colaterales de segundo y tercer grado; tanto por afinidad como por consanguinidad. De esta manera, dejan de pertenecer al Grupo IV, de colaterales de cuarto grado.

En este caso en concreto, tras la muerte de su tío, su viuda no tenía descendientes y nombró como heredero de una cuarta parte de la herencia a su sobrino político. Este último, a la hora de liquidar el Impuesto de Sucesiones aplicó una reducción de parentesco de 7.850 euros y un coeficiente multiplicador de 1,6676. De esta manera tuvo que hacer un ingreso de 257.098,76 euros.

En este sentido, la Dirección General de Tributos de la Comunidad de Madrid optó por girar una liquidación de carácter provisional con un importe a ingresar de  87.359,34 euros. El Tribunal Económico Administrativo Regional dio la razón al recurrente y dio su aprobación a la autoliquidación realizada. Sin embargo, el Tribunal Superior de Justicia de Madrid consideró que la resolución era nula; ya que consideraba que el sobrino no estaba vinculado con la viuda en el grado de parentesco de colaterales de tercer grado por afinidad. De esta manera no se podía aplicar la reducción.

Finalmente, en el Tribunal Supremo, el magistrado estimó el recurso de casación del familiar. De esta manera resolvió que el sobrino político debe encuadrarse en el grupo III; aplicando su propia doctrina de incluir a los sobrinos por afinidad en este grupo aunque se produjese el fallecimiento de la persona que vinculaba al sobrino y el causante por afinidad.

De esta manera, se aplica la reducción por parentesco según la Ley 7/2005 de la Comunidad de Madrid.